Deshidratación y rehidratación en niños
La deshidratación se produce cuando una persona lo hace no tienen suficientes líquidos y electrolitos en el cuerpo. El cuerpo humano está formado en gran medida por agua, por lo que necesita el equilibrio adecuado de líquidos en su sistema para una buena salud.
La deshidratación puede deberse a la pérdida de líquidos, a la falta de ingesta de líquidos o a una combinación de ambos. La ingesta de líquidos puede disminuir cuando una persona está enferma. Grandes cantidades de Los líquidos pueden perderse por fiebre, diarrea, vómitos o sudoración.
La deshidratación se produce muy rápidamente en bebés y niños pequeños. Esto se debe a que no tienen tanto líquido que evitar. Estos tampoco puede decir cuándo tienen sed ni buscar líquido. La deshidratación puede convertirse rápidamente en muy grave. La rehidratación es la forma importante de devolver esos líquidos al cuerpo. Esto restaura el funcionamiento normal.
Signos de deshidratación
Esté atento a estos signos de deshidratación. Esto es especialmente cierto si el niño tiene fiebre o diarrea, o es vómitos:
Deshidratación de leve a moderada
-
Sequedad de boca y labios
-
Sed extrema
-
Menos interactivo y juguetón
-
Punto blando hundido en la cabeza de un bebé o niño pequeño
-
Menos de 6 pañales húmedos al día durante bebés o micción menos frecuente en niños de edad avanzada
Deshidratación grave
Tratamiento de la deshidratación
Si sospecha deshidratación, llame al al médico. Puede tratar la deshidratación leve en casa realizando la a continuación:
-
Lleve un registro de la cantidad de líquido al niño bebe y con qué frecuencia orina.
-
Lactancia materna o alimentación con biberón bebé enfermo con más frecuencia, pero durante períodos de tiempo más cortos.
-
Tratamiento de rehidratación oral (TRG). El pediatra puede aconsejarle darle al niño una solución líquida especial para beber. Estas soluciones están disponibles en muchas farmacias y supermercados. Siga las instrucciones del profesional sanitario sobre cómo darle esta solución a su hijo.
-
Manténgase alejado de refrescos, té, zumo, caldo o bebidas deportivas. Estos pueden empeorar los síntomas.
-
No use medicamentos para vómitos y diarrea, a menos que el médico se lo indique.
-
Si al niño le cuesta mantener los líquidos bajos y deshidratarlos mucho, su profesional sanitario puede decidir tratar en un hospital. Allí, un profesional puede hacer que el niño se sienta cómodo. Su hijo se le administrarán líquidos y nutrientes por vía oral o intravenosa (por vía intravenosa) línea. Se pueden administrar medicamentos para detener los vómitos y permitir que el niño beba líquido suficiente para mantenerse hidratado.
Cuándo ponerse en contacto con su médico
Solicite atención médica de inmediato si su niño:
-
Tiene fiebre (véase Fiebre y niños, a continuación).
-
¿Vómitos del bebé en todos los alimentos? (no solo escupir).
-
No ha orinado durante 6 horas o más o tiene orina oscura o con un olor fuerte.
-
No se puede beber ni siquiera de pequeño tamaño cantidades de líquido sin vómitos.
-
No se puede tranquilizar o es muy irritable o inquieto.
-
Parece inusualmente somnoliento, apático, débil o cojera.
-
Tiene calambres musculares.
-
Tiene sequedad, arrugas o piel de aspecto pastoso, ojos hundidos, boca muy seca o pegajosa, o agrietada labios.
La fiebre y los niños
Use un termómetro digital para controlar la temperatura de su hijo. No utilice un termómetro de mercurio. Existen distintos tipos y usos de los dispositivos digitales termómetros. Estos incluyen:
-
Rectal. En niños menores de 3 años, un la temperatura rectal es la más exacta.
-
Frente (temporal). Funciona para niños de edad avanzada 3 meses o más. Si un niño menor de 3 meses presenta signos de enfermedad, esto puede para una primera pasada. Es posible que el profesional sanitario desee confirmar con una prueba rectal temperatura.
-
Oído (timpánica). Las temperaturas de los oídos son exactas después de los 6 meses de edad, pero no antes.
-
Axilar. Este es el menos fiable pero puede usarse para un primer pase para comprobar a un niño de cualquier edad con signos de enfermedad. Es posible que el proveedor desee confirmar con una medición de la temperatura rectal.
-
Boca (oral). No utilice un termómetro en su la boca del niño hasta que tenga al menos 4 años de edad.
Use el termómetro rectal con cuidado. Siga las recomendaciones del fabricante del producto instrucciones para un uso correcto. Insértelo suavemente. Etiquételo y asegúrese de que no se usa en la boca. Puede transmitir gérmenes de las heces. Si no se siente bien usando un recto termómetro, pregunte al profesional qué tipo usar en su lugar. Cuando habla con algún profesional sanitario sobre la fiebre de su hijo, dígales qué tipo usó.
A continuación, se presentan pautas para saber si un niño pequeño tiene fiebre. Su El profesional sanitario del niño puede darle números distintos para su hijo. Siga las recomendaciones de su profesional sanitario instrucciones específicas.
Las mediciones de la fiebre para un bebé menor de 3 años con meses de edad:
-
En primer lugar, pregúntele al pediatra cómo debe tomar la temperatura.
-
Rectal o temporal (frente): 38 °C (100,4 °F) o superior.
-
Axilar: 37,2 °C (99 °F) o superior.
Lecturas de fiebre en niños de 3 meses a 36 meses (3 años):
-
Rectal, temporal (frente) o timpánica: 38,9 °C (102 °F) o superior.
-
Axilar: 38,3 °C (101 °F) o superior.
Llamar al profesional sanitario en estos casos:
-
Temperatura repetida de 40 °C (104 °F) o superior en un niño de cualquier edad.
-
Fiebre de 100,4 °C (38 °C) o superior en bebés menores de 3 meses.
-
Fiebre que dura más de 24 horas en un niño menor de 2 años.
-
Fiebre que dura 3 días en un niño de al menos 2 años.